Nicolás Petro ha acusado a Laura Sarabia de corrupción, alegando que ella estaba al tanto de los movimientos financieros de la campaña y que utilizó su cargo para beneficiar a Euclides Torres. Sarabia, quien inicialmente trabajaba como asistente de Armando Benedetti, se acercó a Gustavo Petro durante los primeros días de la campaña presidencial. Según Nicolás Petro
Sarabia conocía todos los detalles de la financiación de la campaña en el Caribe, incluyendo los aportes en efectivo proporcionados por Euclides Torres.
Nicolás Petro explicó que fue Armando Benedetti quien introdujo a Euclides Torres en la campaña, y que Sarabia, en su papel de secretaria de Benedetti, estaba al tanto de los movimientos financieros de la campaña. También destacó el papel protagónico que desempeñó desde el lanzamiento de la campaña en la organización de eventos y manifestaciones.
Sarabia ganó la confianza de Gustavo Petro y desempeñó un papel fundamental en la organización de la agenda. Además, según Nicolás Petro, aprovechó su cargo para ayudar a Euclides Torres a nombrar personas en puestos clave del Gobierno.
La relación entre Sarabia y Torres parece haber sido estrecha, y Nicolás Petro sugiere que Sarabia pudo haber influenciado en el nombramiento de personas en el Gobierno a favor de Torres. Sarabia ocupó el cargo de jefa de gabinete en la Casa de Nariño, pero se retiró tras controversias relacionadas con el uso del polígrafo y acusaciones de chuzadas ilegales. Posteriormente, regresó al Gobierno como directora del Departamento de Prosperidad Social.
Nicolás Petro también afirmó que durante la campaña, la comunicación con Gustavo Petro se realizaba a través de Armando Benedetti y Laura Sarabia.
El proceso penal de Laura Sarabia está en curso, y un fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia determinará si cometió delitos relacionados con el presunto uso arbitrario del aparato de seguridad del Estado para resolver un robo doméstico. Estas acusaciones han involucrado a Sarabia en un escándalo político de alto perfil.