En un acto de violencia sin precedentes, un hombre identificado como José Miguel Thomas Henríquez, de 51 años, fue asesinado a bala mientras realizaba una transacción en un local de giros y apuestas ubicado en la calle 30 con carrera 27, barrio Montes, en el suroriente de Barranquilla.
El fatídico martes quedará grabado en la memoria de quienes presenciaron este escalofriante hecho. Un sicario irrumpió en el establecimiento y disparó contra José Miguel, impactándolo múltiples veces. Aunque fue rápidamente trasladado al Hospital General de Barranquilla, lamentablemente, la vida de la víctima no pudo ser salvada.
La aterradora escena no quedó ahí, pues una bala perdida se incrustó en el vidrio protector donde se encontraba la cajera del local, afortunadamente sin causarle daño físico.
El modus operandi del ataque sugiere una planificación meticulosa. La Policía ha recopilado información que apunta a que el sicario escapó en una motocicleta conducida por un cómplice, mientras que otros dos individuos iban en otra moto como acompañantes. Uno de estos vehículos tenía una distintiva canastilla de domiciliario.
El asesinato ha dejado a la comunidad consternada, exigiendo justicia y respuestas a las autoridades para detener la creciente ola de violencia en la ciudad. Este trágico episodio pone de relieve la urgente necesidad de abordar y enfrentar el problema de la criminalidad en Barranquilla.
Las calles de la ciudad se sumen en la incertidumbre mientras la investigación continúa, buscando esclarecer los móviles detrás de este brutal ataque. El llamado a la cooperación ciudadana es esencial para lograr capturar a los responsables y brindar un mensaje claro de que los actos de violencia no serán tolerados en nuestra sociedad.