Barranquilla, ¿líder en calidad de vida? Entre las cifras oficiales y la realidad marcada por la violencia

El alcalde de Barranquilla, Álex Char, afirmó este jueves que la ciudad es “líder nacional en ventas, empleo e inversión”, basándose en cifras de la Cámara de Comercio que reportan un aumento del 38,9% en las ventas de las empresas durante el primer semestre de 2025.

Sin embargo, detrás de este panorama optimista, la realidad que viven miles de barranquilleros es muy distinta. Mientras Char habla de oportunidades y calidad de vida, la capital del Atlántico también se ubica entre las ciudades con mayores índices de homicidios, extorsión y control de bandas criminales en el país.

En barrios enteros, comerciantes, transportadores y hasta tenderos de esquina son víctimas de extorsiones sistemáticas impuestas por estructuras como Los Costeños y el Clan del Golfo. La llamada “guerra del microtráfico” ha dejado un reguero de muertes, generando miedo e inseguridad.

¿Cómo hablar de calidad de vida cuando la violencia cobra vidas a diario, cuando el crecimiento económico convive con la zozobra de la extorsión y cuando la inversión se ve amenazada por el dominio criminal?

Los números oficiales muestran un progreso económico, pero en las calles, la otra cara de Barranquilla refleja una lucha diaria contra el crimen organizado que condiciona la vida de sus ciudadanos.